La primera edificación con la que cuenta la Gruta se construyó pensando en una iglesia para las/os trabajadoras/es, es por eso que en el interior de ella están las imágenes de la virgen María y José, dos trabajadores, según comenta el párroco Francesco Bottacín.
Los orígenes se remontan a 1940 cuando Steverlink, empresario fundador de la Textil Uruguaya ubicada en la calle Chicago en el actual barrio Casavalle, decide donar el predio como forma de promover el barrio. Un año después ya funcionaba una escuela en un galpón anexo que fue la génesis de la Gruta. “Desde esta escuela nace la gruta. Según dicen las crónicas, un cura holandés (Juan Karskens) cuando terminaba la clase llevaba a los niños a donde hoy hay tres cipreses, allí había un tronco de eucaliptus con una imagen de la virgen y le pedía que naciera en Montevideo un santuario de Lourdes”, cuenta Francesco.
En 1947 el Arzobispo de la época, Mons. Barbieri, oficialmente inauguró la nueva Gruta que fue acompañada por una procesión de cerca de dos mil personas. Actualmente, los 11 de cada mes, la Gruta recibe a cientos de visitantes, pero en febrero, fecha oficial de la Virgen de Lourdes, allí se llegan a reunir hasta 70 mil personas.
Recorrido
En la Gruta se puede realizar un recorrido que permite conocer un espacio de importancia patrimonial, así como los católicos encuentran allí un lugar para conectarse con su espiritualidad. Tal como comenta Francesco, el recorrido se realiza libremente, pero en su mayoría las/os visitantes deciden hacerlo en orden:
Parroquia del Salvador:
En la entrada se puede divisar una parroquia de estilo nórdico con mucha presencia de la madera, propia de la arquitectura de la región norte de Europa. Es la primera edificación del lugar, por tanto la más antigua, que data de la década del 40. “Llegaron a atender esta iglesia los padres del Sagrado Corazón, que tienen una espiritualidad social y de compromiso con los trabajadores y las personas que lo necesitan”, cuenta Francesco.
La santería:
Es la primera etapa para quienes van a realizar su peregrinaje religioso y es en donde se compran las velas, medallitas o diversas imágenes de la virgen.
Escuela del Salvador:
Comenzó como un galpón en 1941, cuando el párroco Karksens comenzó a dar clases, y funcionó como escuela hasta la década del 60. Actualmente son los salones de la parroquia en donde los martes se realizan actividades para las/os niñas/os con talleres y merienda.
El Calvario:
La gente se dirige luego a la zona que lleva este nombre, Franceso agrega que hay gente que solo va al calvario y que no conoce la gruta. Allí se encuentra una imagen de Jesús en la cruz.
“La imagen es muy particular: la cara de Jesús es una cara de una persona serena, sufre pero es serena. Los pies están gastados por una identificación (de los peregrinos) con el sufrimiento”. Los pies muestran un desgaste como consecuencia de que las/os visitantes tocan los pies, mientras rezan o se persignan.
Imagen de Santa Bernanardita:
El recorrido continúa por la imagen de Bernardita, la niña a quien la virgen se apareció en Francia.
Gruta:
La Gruta conserva dos piedras de la original que fueron traídas de Lourdes por la esposa de Steverlink. Según narran, ella fue a Francia a la Gruta original pidiéndo una piedra para instalar en la de Montevideo. Le entregaron dos piedras pequeñas, no confome con ellas habló con el jardinero, a quien le explicó la situación y le entregó dos piedras más grandes.
Las piedras y la imagen de la virgen de Lourdes también muestran el desgaste porque los feligreses necesitan tomar contacto con sus deidades, explica Francesco.
Cruz de la Paz:
El artista Eduardo Lapaitis hizo la cruz para que fuera colocada hacia el Batallón Nº 13, lugar que fue prisión de presos políticos durante la dictadura (1973-1985). Finalizada la misma, se buscaba colocar un símbolo de la paz, de la unión y la reconciliación. Está elaborada con mil piezas unidas que representan esa idea. Fue bendecida por el Papa Juan Pablo II durante su visita en 1988.
Capilla y agua bendita:
El recorrido se completa con una capilla que fue construida en el 2000 y remodelada en 2008, que está en uno de los lados del altar de la gruta. Para finalizar está el agua de Lourdes, que es agua bendecida perteneciente a un pozo natural.