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Casavalle

Debe su nombre a Pedro Casavalle, propietario de las tierras que hoy en día forman parte del barrio. Casavalle era originario de Buenos Aires; en 1803 adquirió dos chacras en esta zona, cuya división en parcelas y estructura de caminos fueron la base para su urbanización posterior.

La propiedad de Pedro Casavalle, sirvió de refugio a los Padres Franciscanos expulsados de la plaza en mayo de 1811 por orden de Elío por ser simpatizantes de la causa patriota. En la misma casa se reunieron en noviembre de 1813 los vecinos orientales que eligieron al Pbro. Juan J. Ortiz y a D. Juan J. Durán, diputados por Montevideo al “Congreso de Capilla Maciel”.

El 17 de marzo de 1823, en las inmediaciones, se libró el combate que lleva su nombre entre las avanzadas imperiales brasileras de Lecor, y las fuerzas patriotas al mando de Manuel Oribe, en donde éstas las derrotaron.

 

Los orígenes

En el siglo XX, las antiguas tierras de Casavalle estaban en manos de Agustín Abelleira, quien las vende a Francisco Piria el 22 de octubre de 1907.

A partir de allí se crearon los primeros barrios a partir de la promoción de agentes inmobiliarios, entre ellos Piria quien compró tierras y las remató, creando el barrio Plácido Ellauri, al que seguirá el jardín de Borro, continuando el proceso de instalación de familias, que en muchos casos se dedicaban a la vitivinicultura.

En este primer período poblacional, se habrían instalado varias familias, que practicaban la vitivinicultura. Durante décadas existieron importantes plantaciones de viñedos. Al día de hoy permanece la Bodega Tres Palmas (Dardanelly) en San Martín y Domingo Arena.

El proceso de población de Casavalle (chacras del otro lado del Miguelete) es tan antiguo como el de Montevideo, pero luego de la ocupación portuguesa de la zona, la Guerra Grande y la crisis de ella derivada, habría quedado prácticamente vacía. Casavalle es un pueblo que a diferencia de otros nunca se fundó institucionalmente.

El barrio Plácido Ellauri fue creado en mayo de 1908 a partir de un remate realizado por Francisco Piria. Esta fecha puede ser tomada como refundacional de la zona puesto que a partir de la promoción de agentes inmobiliarios, numerosas familias comienzan a instalarse en la zona.

Por otra parte, la creación del barrio jardín José Borro data de 1926, aceleró el repoblamiento de la zona. Se remataron 200 quintas por parte del Banco Popular del Uruguay. Entre los argumentos para promover la compra de tierras en la zona encontramos: la aptitud de los predios para construir quintas, la gran variedad de árboles frutales y la inminente instalación del tranvía Nº 48 de La Comercial.

El nombre del barrio corresponde a un industrial tabacalero de la zona, quien fabricaba los cigarrillos "Guerrillero", nombre de un caballo ganador del premio en el Hipódromo de Maroñas.

En 1930 se lotearon 104 solares luego de efectuarse el fraccionamiento de los campos de Ana Bascou de Muracciole. En los planos originales, puede verse la proyección de la avenida San Martín de 28 metros de ancho con veredas de 4 metros a cada lado. Estos solares fueron comprados "a plazo", a través de la Caja Nacional de Ahorros y Descuentos, dependencia del BROU, Sección Administración de Propiedades.

En 1932 el industrial belga Leonard Steverlinck instala la Textil Uruguaya SA. En esos años la industria textil uruguaya tenía un gran desarrollo. En la década de 1940, desde la dirección del Plan Regulador, queda manifiesta la intención de que la zona permanezca como parte del cinturón verde de la ciudad.

Cuentan familias de la zona, que incluso hasta el año 1950, eran numerosos los eucaliptos que habían en toda la zona, principalmente al borde de los caminos. También habría numerosas palmeras junto a los principales caminos.

 

Nueva etapa de poblamiento

En 1941, se promueve desde la Junta Departamental de Montevideo la vivienda de plano económico y a partir de aquí se aceleraría el proceso de población de la zona ya iniciado a partir de 1908.

Un terreno de 1.100 m2 con plano económico, se pagaba en el año 1951 con una entrega de $ 210 (pesos) y 359 cuotas de $ 42 (pesos), más una última cuota de $ 1.732. Muchas/os vecinas/os efectuaron su compra por este método.

En 1959 se construye la Unidad Casavalle, impulsada por el gobierno de la época, que consiste en un conjunto de viviendas en donde se realojaron familias provenientes de otras áreas de la ciudad.

En este período se produjo una fuerte corriente inmigratoria de italianos y gallegos. El contexto histórico para que estos españoles abandonen su país durante el período de 1946-1958. Gran parte de las familias europeas, procedían del campo y venían con una tradición de producción agrícola. A mediados de los años 1950, la crisis social en Uruguay llevó a que muchas familias de origen rural emigraran del campo a la ciudad y se asentaran en poblados precarios.

En 1972 este proceso continúa con la inauguración de la Unidad Misiones –conocida como “Los Palomares”- conjunto que se había planteado como “transitorio”, pero que continúa presente hasta el día de hoy. En los años siguientes esta política estatal consolidó fragmentos de población aislados de su entorno, a lo que se sumaron ocupaciones informales por personas que se vieron obligadas a abandonar las áreas del centro de la ciudad, proceso que se profundiza hacia 1990.

 

Integración y mirada estratégica

En Casavalle viven cerca de 80.000 personas en 23.481 hogares, constituyendo el 6% de los habitantes de Montevideo. Principalmente viven personas más jóvenes que en el resto del departamento, encontrándose que el 43% de los residentes son menores de 18 años y apenas el 17% son mayores de 49. Estos datos muestran una situación muy diferente en relación a la realidad demográfica del resto de Montevideo.

Es una de las zonas con mayor vulnerabilidad en donde se concentran problemáticas de vivienda, desempleo, informalidad laboral y dificultades de acceso a los servicios básicos, entre otras situaciones sociales. De acuerdo a esta realidad, en 2009 se crea el Plan Cuenca Casavalle, que consiste en un marco de acciones estratégicas que buscan revitalizar la zona, mejorando la calidad de vida en aspectos como infraestructura barrial, integración social, seguridad, salud, vivienda, empleo y educación.

El Plan se pone en marcha a través del Consejo Casavalle, órgano integrado por representantes de los organismos públicos y del Concejo Vecinal, en donde se coordinan y potencian las acciones que cada institución lleva adelante. En el marco de este plan se vienen desarrollando acciones que revitalicen la zona, concretando obras de infraestructura de gran relevancia para el barrio.